Y la invitación para lo de Bancomer en el Carrillo podría ser la de MACO, tiene el formato y ese trazo a vectores tan típico de las invitaciones, pero con un tono tierra con aire de museo.
Entre más me cuentan más cómico me parece. Desde la convocatoria escuché cosas al aire, quejas y expectativas, no por que la gente no hable mucho, pero es que tampoco era de mi interés, sólo que ha sido tanto el ir y venir de comentarios y situaciones, al punto de afectar mis citas para cenar, que ya es justo una nota al pie de todo esto.
Se supone que antes de la molesta entrevista los resultados ya tenían una tendencia (al carisma), aún así los artistas que fueron invitados a participar en la selección, y lo escribo mientras no puedo evitar una mueca de risa por que ya desde aquí es risorio, siguieron adelante subiéndose a la tarima a presentar su pieza frente a los demás, como si la obra requiriera de esa confrontación tan escolar. Si me apoyo en el comentario de Phillipe Ségalot sobre las posiciones en el medio del arte, los artistas quedan en la posición más incomoda.
Hubo, como en toda convocatoria, aquellos que le dieron el beneficio de la duda. Encuentro un gran problema en todo esto, y hago el comentario sabiendo que lo que menos le interesa a los creadores es, en primer lugar el poder sobre su obra y en segundo su organización como grupo: El control de la producción está en manos de quien la produce, lo que quiere decir, si, que incluso los asistentes tienen su parte de poder en este poco complicado sistema, y que el éxito de salir intacto en estos filtros selectivos es muy valioso.
Pre-inauguración, prefijo por antonomasia de todo este singular proceso, hay que dividir a los buenos de los malos, a los pobres de los ricos, a los que deben de los que no, ¿qué significa esto? que una convocatoria tan organizada por dos instituciones con la capacidad productiva para tal cuestion, no tiene la capacidad operativa de dar resultados que apoyen la trayectoria de la obra de sus artistas consistentemente, pero si en términos temporales, dejando abiertas simplemente expectativas de reconocimiento.
